La UNAM Chicago se une al Consulado de Colombia para celebrar la obra del artista Juan Carlos Ospina, con la inauguración de su exposición pictórica “Huellas,” afirmó el cónsul del país sudamericano en Chicago, Dixon Moya.
Inaugurada en la galería de la sede de la UNAM en Chicago, por el embajador Moya, y con la presencia de la cónsul de México en esa ciudad, Reyna Torres Mendívil, y un numeroso grupo de invitados, el diplomático colombiano agradeció a Guillermo Pulido y a sus colaboradores, a quienes se refirió como “amigos entrañables de su país.” Explicó que los cuadros del artista aluden a las huellas de los pies del caminante, pero también a las huellas de las manos del artista y sobre todo a las huellas que se quedan en el corazón.
El maestro Juan Carlos Ospina Ortiz ha desarrollado buena parte de su carrera artística en España, explicó Moya, país en donde se le hizo un importante reconocimiento con una serie de sellos postales, y sus obras han sido expuestas en galerías tanto de Europa, América y Asia. “La calidad de su arte es innegable y sólo es comparable a su modestia y sencillez, así como a una impresionante capacidad de trabajo, que se refleja hoy en las paredes de la querida UNAM Chicago”, afirmó el cónsul.
Por su parte, Erika Erdely, secretaria académica de la UNAM Chicago, agradeció la presencia de los invitados y se congratuló de que este recinto sea la sede de esta exposición. Recordó que el gran proyecto internacional de nuestra Universidad inició en 1944 con la apertura de su sede en la ciudad de San Antonio, Texas, y la sede en Chicago abrió sus puertas hace más de 20 años.
Hoy tiene 10 oficinas de vinculación en el mundo, cinco de las cuales se encuentran en Estados Unidos. “Esto habla de la importancia de este país para los mexicanos y la para la “Universidad de la Nación”, afirmó Erdely.
Respecto a la inauguración de Huellas, expresó que UNAM Chicago es un lugar en donde “la magia sucede” constantemente gracias a sus eventos académicos y culturales como exposiciones, conciertos, conferencias, cualquier cosa que permita reunir gente interesante e interesada en lo que aquí sucede.
“Nos sentimos muy contentos y honrados que el consulado de Colombia en Chicago haya elegido nuestra sede para organizar uno de los eventos de despedida del cónsul Dixon, quien ha traído aquí funciones de cine, conferencias literarias, pero sobre todo, nos ha dejado su amababilidad, su generosidad y su alegría.
En general, concluyó Erdely, nuestros queridos amigos de los consulados latinoamericanos en Chicago han hecho de este espacio un lugar para enriquecer a nuestras comunidades.
